Por: Manuel Ortega Cárdenas

CEO

WALLACE&DARWIN

“Nadie sabe hacer todo, pero todos sabemos hacer algo, entre todos podemos con todo.”

Alguna vez una muy buena amiga me preguntó por qué tengo tantos socios, si es muy difícil ponernos de acuerdo, tomar decisiones, ejecutar planes, entre otras cosas. Mi respuesta es un rotundo NO y aquí mi explicación.

La cultura de Wallace&Darwin esta construida con base en una honestidad radical. ¿A qué me refiero con honestidad radical? Hablar, entre todos y en todo momento, de manera sincera, clara, precisa, oportuna y abierta sin importar posiciones. Queremos retarnos entre todos, queremos que nadie se quede callado, queremos que debatan y que defiendan sus puntos de vista, queremos que tomen riesgos, queremos que exploten el poder de su creatividad, queremos que la rieguen, queremos que se levanten, queremos que compartan todo, queremos que jueguen como equipo, aunque las victorias individuales son válidas, queremos que quieran que haya cambios constantes, y todo esto solamente se logra con una cultura de honestidad radical.

Los socios del grupo Wallace&Darwin somos los principales embajadores de la honestidad radical. Todos estamos enterados de qué es lo que está pasando, qué es lo que pasó y qué pasará en cada una de las agencias del grupo, pero no solo los socios, los colegas lo están de igual manera, incluso en temas que muchas otras empresas creen que son “confidenciales”. Un ejemplo de lo anterior es la presentación “Show me the money” que hace la agencia Catorce Días a todos sus empleados, donde el Chief Business Officer presenta los resultados financieros mensuales, semestrales y anuales. Toda la información financiera está abierta a cualquier empleado porque creemos que todos son parte de estos resultados, todos merecen saber qué está pasando con la esencia del negocio (facturación, utilidad, rentabilidad). Muchos pensarán: si le enseño a mis empleados la información financiera, muchos pedirán aumentos o bonos, o mostrarán algún tipo de inconformidad. Sin embargo, los que piensan de esa manera deben replantearse la idea de esta forma: ¿estaré pagando lo equitativo?, ¿mi equipo está bien recompensando? Porque lo que sí puedo asegurar es que no estás siendo honesto contigo, con tu empresa, con tus colegas, es decir, no estás siendo radicalmente honesto.

Aunque a veces duele, aunque a veces molesta, aunque a veces incómoda y otras tantas veces serás señalado, siempre debes comunicarte con una honestidad brutal, ser directo y no hacer perder el tiempo de las personas, pues el tiempo es el bien más preciado que tenemos. Es importante ser abierto con todo tu equipo. En un equipo de fútbol es tan importante el portero como el delantero; así, en tu empresa es tan importante el coordinador como el gerente. Sé oportuno y si dudas habla, porque si eres honesto no vas a fallar. Sé claro, muy claro, lo más claro posible, olvídate de los rodeos y de la política. Sé HONESTO.