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Por: Nicolás Hauff

Founder & CEO

FILLGAP BUSINESS GROUP

“¡Transfórmate en un Líder Basado en la Estrategia!”

“La estrategia sin ejecución es tan solo un sueño. La ejecución sin estrategia es una verdadera pesadilla.” -Autor desconocido

En 2014 me embarqué en el ambicioso proyecto de escribir y publicar mi primer libro. En el pasado había participado como colaborador en distintas publicaciones de terceros, pero fue en aquella ocasión que decidí darle vida a un libro por cuenta propia. Estaba por cumplir 50 años y justo estaba en medio del proceso de reinventar mi negocio y mi vida profesional.

El producto final de este proyecto fue el libro denominado The Three Challenges: How to Become the Strategy Based Leader that the Modern Business World Demands.

Cuando estaba a punto de concluir aquella obra, comprendí que me estaba dirigiendo en gran parte al “yo” que había sido en el pasado. Le había estado diciendo a ese hombre de 32 años que estaba iniciando su propio negocio, lo que necesitaba entender sobre la vida como emprendedor. Y al haber estado compartiendo con mis lectores las cosas que me hubiera gustado saber entonces, también le había estado diciendo a mí “yo” de 50 años las cosas que necesitaba recordar, mismas de las cuales quiero compartir contigo tres de ellas.

Lecciones para recordar

1. Nada dura para siempre

Algo que me ha costado mucho trabajo y que estoy seguro de que le pasa también a muchos otros empresarios, es reconocer que nada dura para siempre. ¡La única constante que hay en la vida es el cambio!

En uno de sus libros, la autora mexicana Gaby Vargas dice: “Cuando crees que vas a vivir para siempre es cuando cometes muchas estupideces.” Eso fue lo que me pasó cuando estaba en la cumbre de mi carrera en mi negocio de tecnología. Cuando estás teniendo éxito, es muy fácil permanecer en tu zona de confort pensando que nada va a cambiar.

Pero la verdad es que todo se desgasta, pasa de moda, sucumbe o simplemente evoluciona con el tiempo, y es en el periodo de transición cuando las crisis surgen. En esos periodos de transición realmente existe un gran riesgo. Pero es también en esos periodos donde hallamos la mayor cantidad de oportunidades, cuando vamos dejando atrás lo viejo al ir entrando a una nueva etapa.

La cuestión más importante aquí no es esperar hasta que surja una crisis, sino permanecer conscientes del hecho de que precisamente nada dura para siempre y desarrollar la habilidad de prepararnos de manera constante para los cambios que el tiempo traerá.

En mi actual rol de estratega empresarial, he tenido la oportunidad de ayudar a una amplia variedad de empresarios a definir el rumbo de sus negocios. Para ese propósito, uno de los ejercicios de reflexión en los que trabajamos es lo que me gusta denominar una “Matriz FODA Contextual”, la cual consiste en evaluar las fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas de la empresa, no como un hecho aislado, sino en el contexto de su entorno y las tendencias que la impactan. Para eso es importante tomar en cuenta diversas fuentes de información así como a todos los posibles actores.

Te invito a pensar en tu propio negocio haciéndote las siguientes preguntas:

• ¿Estás plantado en una zona de confort?
• ¿Hay ciclos que estén por terminar en un futuro próximo y donde sabes que te estás evadiendo para no ver la realidad?
• ¿Cuáles son las tendencias en el entorno que podrían tener impacto sobre tu negocio?

2. Los tropiezos y las crisis pueden convertirse en verdaderos activos con el tiempo

No la viste venir o, peor aún, no quisiste verla venir y ya estás en medio de un contratiempo o una crisis? Lo primero que debes de hacer es reconocerlo tal cual, procurar mantener la cordura y, sobre todo, no flagelarte. Lo hecho, hecho está.

Para desmenuzar el problema y trazar una posible ruta de salida, debes aprender a pensar de manera sistémica porque la mayoría de las crisis no se gestan por una sola causa. Es probable que recuerdes la película La Tormenta Perfecta, en la que los elementos de la naturaleza culminaron en un desastre, sacudiendo a un barco pesquero frente a la costa. Durante una conferencia internacional de SAP a la que acudí hace ya varios años, la discusión giró alrededor de “la tormenta tecnológica perfecta”, en referencia a los retos que cuatro megatendencias estaban imponiendo a la industria y la manera en que los estaban enfrentando como compañía.

A veces, los contratiempos parecen conspirar para hacer que las cosas empeoren. Debemos tener precaución ante las fuerzas que crean una tormenta. Si realmente quieres aprender de un problema, necesitas indagar la raíz de las fuentes que lo generaron. De este modo podrás tener control sobre la trayectoria de la tormenta y hacia dónde conduce. Puedes hacer que la tormenta funcione en tu beneficio en vez de que te dé una paliza, y que se convierta en una fuerza positiva para tu negocio.

Piensa en los propios contratiempos y problemas que has experimentado:

• ¿Cómo los superaste y qué aprendiste de ellos?

• ¿Has sido capaz de ver oportunidades?
• ¿Eres capaz de observar patrones que se repiten una y otra vez en tu forma de actuar?

3. Adquiere conciencia de tu verdadero impulsor para el éxito

En tu negocio, así como en tu vida personal, muchas veces lo que te hace exitoso en algo no es necesariamente lo que tú crees que fue. Puede haber otros impulsores detrás de tu éxito de los cuales tal vez ni siquiera tengas conciencia. Es importante que encuentres cuáles son esos impulsores para que puedas identificar un patrón y replicarlos, ya sea en el mismo giro o en otros.

Nuestro negocio que comenzó en 1996 implementando software administrativo para negocios, hoy está enfocado en soluciones de liderazgo, estrategia empresarial y planeación financiera a través de distintas sociedades y alianzas estratégicas. Reconocimos a lo largo de los años que nuestro verdadero impulsor, basado en mis propios talentos, era nuestra capacidad de establecer sinergias de negocios.

Durante la pandemia, muchos negocios han sucumbido, pero muchos otros han logrado reinventar su oferta de valor y hasta han salido fortalecidos. Estos últimos lo han logrado en gran medida porque desde antes tenían claro su rumbo y también sus competencias. De esta forma, han sabido aplicar esas competencias a su nueva realidad.

Esto no es algo nuevo. Durante la Segunda Guerra Mundial, la empresa de pianos Steinway & Sons aprovechó sus propias competencias para trabajar con la Fuerza Aérea de los Estados Unidos en la producción de planeadores de madera que eran utilizados como guías de los bombarderos.

Un artículo que recomiendo mucho a las empresas con las que trabajo es The Core Competence of the Corporation, disponible en Harvard Business Review. Cuando comprendes y desarrollas la competencia central de tu negocio, incrementas drásticamente tus probabilidades de sobrevivencia y éxito porque ganas claridad sobre las cosas en las que debes de enfocarte.

Comienza por reflexionar:

  • ¿Cuáles son las cosas que han aprendido a hacer súper bien y mejor que otros en tu negocio?
  • ¿En cuáles de esas competencias eres reconocido por tus clientes?
  • ¿Cuáles de esas competencias podrías aplicar en otros mercados más rentables?

¿Líder circunstancial o líder basado en la estrategia?

Actualmente he estado trabajando en una segunda versión de mi libro The Three Challenges, actualizándolo con seis años de retroalimentación recibida por muchas personas y lecciones aprendidas desde entonces.

Un concepto que se ha mantenido constante y que he venido reforzando es el de Liderazgo Basado en la Estrategia (Strategy-Based Leadership), el cual parte de la conclusión que la mayoría de los emprendedores y dueños de empresas PyMEs dirigen sus negocios de acuerdo con las circunstancias que se van presentando y no en función de un rumbo definido que a la vez esté alineado con su propia visión de vida, misma que normalmente tampoco tienen del todo clara.

Es normal, en un mundo tan cambiante, que las cosas cambien día con día y eso impacte tu negocio y tu vida. Sin embargo, sí es posible determinar un hilo conductor que te ayude a tomar las mejores decisiones de acuerdo a las situaciones se presenten. Para eso es necesario que, en tu forma de pensar y actuar, te vayas transformando de un líder que se conduce de forma circunstancial a un líder que se conduce basado en una estrategia.

Para lograr lo anterior, he detectado tres desafíos que debes de entender y superar en todo momento para así dominar tu negocio y tu vida:

1.El desafío de dominarte a ti mismo consiste en aprender a vivir de manera intencional y no de manera accidental. Para eso debes de entenderte a ti mismo, saber cuáles son tus aspiraciones, tus talentos y, lo más importante, qué es lo que te da plenitud.

2.El desafío de dominar el rumbo de tu negocio, el cual se compone de tener clara la visión de tu empresa y la estrategia para acercarte a esa visión.

3.El desafío de dominar el desempeño de tu negocio, es acerca de contar con la organización, los recursos y los procesos para ejecutar tu estrategia, así como las métricas para entender que vas por el camino correcto.

¡Mucho éxito dirigiendo tu negocio con rumbo y viviendo tu vida con intención!


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