Por: Aldo Barrientos

General Manager North LATAM

BEIERSDORF – NIVEA

“El compromiso que tengas con lo que haces es lo que importa hoy… El tiempo se encargará de dar el matiz a tu legado.”

Durante este año, millones de personas hemos sufrido pérdidas repentinas y profundas. No solamente se han perdido cosas materiales, sino también se han impactado millones de vidas en términos emocionales. Conceptos como la libertad, la seguridad y la empatía han ampliado su significado para todo el planeta.

A la par, la furia por las ventas y las utilidades en los negocios continúa y se acelera, pero ahora con diferentes matices que van desde la pura supervivencia hasta el aprovechamiento de la llamada “crisis” para expandir y conquistar. No es que antes no existieran, pero ahora se han hecho mucho más evidentes.

Y de pronto, este nuevo entorno rodeado de retos nos llega como un monstruo de mil cabezas, y nos obliga a plantearnos una pregunta trascendental: ¿Cuál es mi rol como líder en todo esto?

Y aunque no instintivamente, he llegado a entender que este momento constituirá un capítulo central en el legado que cada líder dejará a su paso.

Esta reflexión me ha supuesto cierta paranoia al principio, sin embargo, he encontrado en ejemplos de vida -propios y ajenos-, una forma más afable de enfrentar y comprender esta realidad.

• Este año he vivido la pérdida de mi abuelo quien fue el líder y referencia patriarcal en mi familia. Sin duda, su liderazgo ha estado lejos de la perfección y ha cometido errores como para hacer un libro, sin embargo, es asombroso como al recordarle su legado sale a flote. Todos los errores o desaciertos han desaparecido gracias a las enormes y puras intenciones de hacer el bien que imprimió en cada una de sus decisiones. Y aunque a veces son difíciles, sus juicios siempre implican mucho valor para hacer lo correcto por encima de lo cómodo.

• Una de las cualidades que más valoro en una persona es la autenticidad, pero cuidado con confundir auténtico con diferente. En mi definición, lo auténtico conecta el comportamiento con la intención. Es un placer encontrar a una persona que dice lo que piensa y hace lo que dice. Que lo hace con la intención de hacer el bien, por más mal que haga. He sido afortunado de cruzarme con varios colegas que ahora llamo amigos gracias a ello.

• Compromiso es un aspecto que se menciona mucho más cuando está ausente que cuando está presente. Es muy fácil notar la falta de compromiso, pero no siempre es valorado cuando lo hay y una de las pláticas más comunes en estos tiempos siempre apunta a “la falta de compromiso de las nuevas generaciones”. Creo que no hay nada más lejano a la realidad… Siempre ha habido y siempre habrá personas comprometidas y personas que no lo están. El deporte me ha enseñado que el compromiso no es negociable, y antes que, con un escudo o un equipo, es con uno mismo. No es una circunstancia, es una decisión.

• El tiempo; Elemento indispensable que pone perspectiva a todo y a todos ¿Cuántas veces el tiempo nos ha dado lecciones? Y las que faltan por venir. Lecciones que en mi caso han llegado de todas direcciones… De mis padres, de mis mentores, de mis alumnos, de mis amistades, de mi esposa. En miles de ellas he cuestionado (y a veces recriminado) las decisiones ajenas y, sin embargo, el paso del tiempo ha traído consigo la perspectiva y la oportunidad del aprendizaje. Curiosamente, fue aquel cuestionamiento el que trajo consigo la enseñanza.

• Pero no existe aprendizaje sin la apertura para tomar la lección. Podrá pasar mil veces por enfrente y no será absorbido si no existe la disposición para ello. ¡Que si he repetido errores por no aprender la lección! Y aunque a veces preferimos evadir, es indispensable entender que la capacidad de aprender es una competencia adquirible, expandible y en mi opinión, indispensable.

Mi conclusión, si puede llamarse así, radica en que la importancia del legado viene por lo que será, pero no por lo que es hoy. El valor que imprimas a tus decisiones, la apertura y capacidad de aprendizaje, las intenciones con las que actúes y el compromiso que tengas con lo que haces son lo que importa hoy… El tiempo se encargará de dar el matiz a tu legado.

Así que, si tu rol hoy es ser ese “Manager” que teme ser cuestionado y que siente en sus hombros el peso del entorno y de las decisiones por tomar… Sal de ello y enfócate en hacerlo lo mejor posible y por las razones correctas, el tiempo va a hacer el resto. ¡Toma conciencia y actúa!