Por: Magdalena Zapata de la Cueva
DIRECTORA GENERAL DIVISIÓN COSMÉTICA ACTIVA
L’OREAL MÉXICO
Normalmente “y como si”, es una frase trillada, que se usa para motivar a alguien a ser más creativo, tener iniciativa, y salir adelante. Sin embargo, hoy en día, esta frase parece tener un significado diferente, y puede ser que se vea mucho más lejana que antes, y que represente retos inimaginables hasta este momento.
“Y CÓMO SÍ…”
La época que estamos viviendo es algo que nadie podría haber pensado, como de una película con un argumento de ciencia ficción, y sin embargo, aquí estamos, en medio de una pandemia, donde nuestro presente y nuestro futuro se vieron alterados sin remedio, sin distinguir lugares, países, clases sociales, religiones.. simplemente por estar vivo aquí y ahora, tu vida se ha puesto en “pausa”, y lo que pensaste que seria el “hoy”, no tiene nada que ver con lo que estás experimentando.
Este tipo de acontecimientos, después de las grandes guerras, o las grandes depresiones económicas, no se habían vuelto a dar, no había nada que se entrometiera entre tus sueños y tu. Para muchos de nosotros, si lo querías hacer, lo podías lograr, si lo buscabas con suficiente determinación. Pero hoy, es diferente. Llevamos más de tres meses “en cuarentena”.. donde la libertad, de salir, de abrazarse, de estar juntos, tiene un nuevo significado. Hoy no podemos hacer lo que queramos, no podemos planear el futuro, no vemos a nuestros amigos, a nuestra familia, y si, desde cuatro paredes en la mayoría de los casos, contemplamos al mundo pasar, sintiendo miedo y gran tristeza cuando vemos a personas que pierden a sus seres queridos y ni siquiera pueden decirles adiós.
Después de los primeros días, de los primeros meses, que ya ha pasado el “shock” inicial, empiezas a pensar, a cuestionarte.. “y ahora que?”, como será la vida, como será el mañana, podremos volver atrás? Podremos volver a la vida como antes?.. y la respuesta que nos damos unos a otros, es que no, que ya nunca regresaremos a la vida “normal” y que esta será una “nueva normalidad”.. comenzamos a hacernos a la idea de este concepto, y tratamos de adaptarnos, y de imaginar como será todo en adelante. Yo podría sin temor a equivocarme, describirme como “una positiva empedernida”, tengo la tendencia a ver las cosas buenas de la vida, a ver la “copa medio llena”, a confiar en el futuro, y sonreír ante la adversidad.. Esto me lleva casi siempre, a acabar preguntándome en gran variedad de circunstancias, “y como si”… y ésta no es la excepción. Hoy me despierto por la mañana, y escucho a los pájaros trinar en mi ventana, e inmediatamente siento ganas de seguir, de caminar y llegar a encontrar “como si”.. aún sin moverme de casa, cómo sí.. hacer una diferencia significativa a mi alrededor, en mi familia, en mis compañeros de trabajo, en mis amigos, ..en el mundo.
Escuchaba hace unos días una entrevista a Madeleine Albright, donde ella decía, que durante la guerra, que vivió junto a su familia, aprendió una cosa, y es que “uno no puede controlar las cosas que pasan a tu alrededor, como una guerra o una pandemia, lo que sí puede controlar es el cómo reaccionar ante ellas”.
Esto me lleva a preguntarme cuáles son las características que deberán tener aquellas personas que acaben triunfando en esta nueva realidad. Cuales son las virtudes, los comportamientos, la forma de ser, de aquellos que encontrarán el “como si”, y salgan victoriosos de todo esto. Es difícil saberlo, y más difícil aún imaginar esta realidad. Sin embargo, hay ciertas características que yo estoy segura, hacen desde ya una diferencia, y logran influir en la sociedad de hoy, para llevarla a cruzar este mar de incertidumbre, hacia un nuevo horizonte, y son las que trataremos de inculcar en las nuevas generaciones, para que éstas encuentren el “como si”.
- Resiliencia
Es muy importante en esta época, y realmente en cualquiera el tener la flexibilidad para adaptarse al entorno, para reinventarse y aceptar que las cosas no van a salir exactamente como las pensamos, que pueden ser diferentes. La capacidad para adaptarse al entorno, la capacidad de volver a empezar, de cambiar el rumbo y buscar otro camino cuando el camino que te habías trazado resulta no ser el correcto. Cambiar, y retomar.. pero rápido.
- Visión
Tener la capacidad de ver más allá, la capacidad de ver el bosque, y no los arboles, poder pensar a largo plazo, y tomar las decisiones de acuerdo a lo que buscamos lograr en el futuro. Imaginar lo que podría ser, y trabajar para ello.. si no lo puedes imaginar, si no lo puedes visualizar, no podrás alcanzarlo. Pero no es solo verlo como algo lejano, y digno de un libro de éxito, sino poder interpretarla y “bajar” esta visión a estrategias y planes concretos.
- Liderazgo
Aquellas personas que son un ejemplo a seguir, y que dibujan una visión, que los demás quieren alcanzar, que logran inspirar a los otros para ser mejores personas, para lograr objetivos más altos, romper barreras y alcanzar metas.
- Pasión
Tener la fuerza, la determinación, la “garra”, para lograr tus objetivos, contra viento y marea.. no parar, no darse por vencido, por mas difíciles que estén las cosas. No rendirse, y si te caes, te levantas con más fuerza, dando todo lo que tienes y más, para llegar…
- Empatía
Esa generosidad de corazón, para poder ponerte en los zapatos del otro, tener la sensibilidad para darte cuenta de lo que siente, lo que necesita, y lo que hace vibrar al otro. Esta capacidad de ver más allá de ti mismo, genera comunidad, genera lealtad, y desarrollo de las familias, las sociedades, los pueblos y los países.
Yo elijo pensar que las vicisitudes de la vida, y los grandes retos como los que hoy vivimos, representan para los que logran salir de ellas, una gran oportunidad, una gran oportunidad para aprender, para fortalecernos interiormente, para apreciar las cosas de una manera distinta, para reinventarnos, y salir siendo mejores seres humanos, más conscientes de nosotros mismos, de lo que nos rodea, de lo que realmente vale en la vida, y lo que no. Viviendo más intensamente cada momento, aprovechando cada instante, y logrando construir la felicidad como un camino, y no como un fin.
Es por esto que hoy yo estoy convencida de que cada uno podemos encontrar el “como si”, salir victoriosos de una circunstancia como esta, de como tomar nuestro destino en nuestras manos, elegir el cómo vamos a reaccionar y actuar ante lo inevitable, y darle la vuelta, con una gran resiliencia, mostrando visión y liderazgo, y sobre todo con una gran pasión para lograr nuestras metas. Esto, sin dejar de tomar en cuenta al otro, porque hoy más que nunca, nuestros destinos están atados unos a otros, la empatía para reconocerlo es lo que nos va a dar la pauta de “como si” salir adelante, victoriosos y felices.
