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Por: Jacques Waiss

DIRECTOR GENERAL

MEXDESA

La felicidad es el estado emocional de una persona feliz; es la sensación de bienestar y realización que experimentamos cuando alcanzamos nuestras metas, deseos y propósitos; es un momento duradero de satisfacción, donde no hay necesidades que apremien, ni sufrimientos que atormenten.

La felicidad es una condición subjetiva y relativa. Como tal, no existen requisitos objetivos para ser felices: dos personas no tienen por qué ser felices por las mismas razones o en las mismas condiciones y circunstancias. En teoría, el sentimiento de auto-realización y el cumplimiento de nuestros deseos y aspiraciones son aspectos importantes para sentirnos felices.

No obstante, para ser felices a veces no es necesaria ninguna condición previa, y así, hay personas que están siempre felices y que se sienten a gusto con la vida y con aquello que les fue otorgado en gracia, y personas que, pese a que tienen todas las condiciones para estar bien, se sienten profundamente infelices.

“Cuando estás en busca de tu sentido de propósito, o cuando buscas la felicidad, estás siendo un emprendedor de ti mismo”.

¿Cómo alcanzar la felicidad? El psicólogo, científico y conferencista Tal Ben-Shahar decidió responder esta pregunta cuando era Catedrático en la Universidad de Harvard. Eso lo llevó a emprender una exhaustiva investigación a través del campo de la psicología positiva enfocada en estudiar y replicar los aspectos positivos de la naturaleza del ser humano. Las respuestas que obtuvo durante esta búsqueda se convirtieron en el seminario más popular de Harvard por varios años, y en una serie de libros que ayudan a la gente a ser más feliz y a derrumbar el mito de que el éxito es igual a la felicidad.

La verdadera felicidad no consiste en alcanzar una versión perfecta de nosotros; más bien surge cuando apreciamos el mundo tal como es y somos capaces de sacar lo mejor de cada situación. Aspirar a metas específicas puede otorgar alegría, pero no lleva a la felicidad. Así, nuestra felicidad dependerá de la actitud que tomemos frente al mundo, esto resulta especialmente relevante ante el nuevo mundo que nos estamos enfrentando, aunado a la preparación y a la capacidad de resiliencia que tengamos para enfrentar y ser de nuevo felices ante la nueva normalidad del 2020, pues estamos a punto se enfrentarnos y conocer a un nuevo mundo, con distintas formas y fondos, no estudiados ni experimentados.

Es por lo anterior, que me gustaría compartirles algunos hábitos que introduce Ben-Shahar y que a la vez son tan sencillos como hacer 30 minutos de ejercicio diarios como antídoto para paliar el estrés y la tristeza y tomar un buen desayuno por las mañanas para tener energía.

Luego, vamos a otros dos hábitos más personales, como es el hecho de ser agradecidos y optimistas y trabajar la asertividad como habilidad social y de comunicación. Respetar a los demás mejora nuestra autoestima.

El quinto hábito será la inversión de dinero, pero no en posesiones, sino en experiencias. Mejor un viaje que una gran televisión.

Luego, pasamos a nuevos hábitos más psicológicos. El sexto implica enfrentar los retos, no postergarlos, pues genera ansiedad. El séptimo nos invita a rodearnos de bonitos recuerdos que nos hagan más felices. Y el octavo nos lleva a ser más amables en el día a día para mejorar el estado de ánimo.

También el estado físico implica felicidad. Por ello, es recomendable vestir zapato cómodo para evitar el mal humor por el dolor de pies y cuidar la higiene postural. Estos serían el noveno y décimo.

Los tres últimos nos invitan a escuchar buena música, cuidar con mimo nuestra alimentación haciendo una ingesta cada tres o cuatro horas sin saltarse ninguna y arreglarnos para sentirnos atractivos.

Parece muy sencillo, ¿verdad? Pues manos a la obra, que son nuestro bienestar y felicidad los que están en juego.

Debemos aprender a identificar las expectativas correctas; es decir, los verdaderos objetivos que queremos alcanzar, más allá de la simple ambición, con una constancia y una impresión diaria de esfuerzo. Además, como líderes claro que tenemos una responsabilidad en nuestras organizaciones, pues al narrar las mejores experiencias de liderazgo, los momentos más felices de la organización y al lograr crear un ambiente de felicidad, lograremos obtener negocios más exitosos y felices.

Así que en un año complicado sui generis y lleno de incertidumbre, pongamos buena cara y seamos felices junto con nuestros seres queridos.

El éxito es conseguir lo que se quiere… La felicidad es querer lo que obtienes. Dale Carnegie


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